Puede que estés invirtiendo en cosmética, rutinas, tratamientos y aún así tu piel no mejore. Lo que muchas personas no saben es que una parte clave del cuidado facial no está en el baño… sino en la cama.
Tu funda de almohada puede ayudarte a mantener una piel sana o, por el contrario, empeorar tus problemas cutáneos. Y según tu tipo de piel, esto es aún más importante.
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Piel grasa o con tendencia al acné: El algodón acumula sebo y bacterias. Esto puede provocar brotes cada noche. La seda es ideal porque es antibacteriana y no obstruye los poros.
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Piel seca o sensible: La fricción del algodón puede irritar y resecar. La seda, al ser extremadamente suave, reduce la pérdida de hidratación y evita rojeces.
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Piel madura o con arrugas: La seda previene líneas de expresión al evitar la fricción constante sobre la cara. Además, ayuda a retener la hidratación natural, mejorando la elasticidad.
Elegir seda como tejido de contacto diario con tu piel es un paso sencillo y poderoso. En Nytsleep usamos seda de morera 100% natural con certificado Oeko-Tex, libre de tóxicos. Nuestras fundas están pensadas para cuidar tu piel como parte de tu rutina nocturna.
No es magia. Es ciencia + autocuidado. Cambia tu funda y observa la diferencia.